Los juegos de mesa son una gran manera de distraernos en nuestro día a día. No hay nada mejor que llegar a casa después de un largo día y abrir la caja de ese juego que te encanta para olvidarte de todo. Pues resulta que con esa partidita que echas todos los días a tu filler favorito es mucho más beneficiosa de lo que creías.
A menos que seas un loco de la competición y te agobie perder, los juegos de mesa son una gran forma de desconectar y pasar un rato divertido. Al relajarnos, el cuerpo se destensa y segregamos dopamina y serotonina haciéndonos sentir mejor y más felices. Así que, si un día llegas a casa con el estrés por las nubes ya sabes, abre tu Medang y distráete construyendo un templo en la Isla de Java.
Sabemos que las redes sociales nos llaman con sus cantos de sirena y también que muchos nos hemos propuesto reducir el tiempo que pasamos con pantallas. Para eso también puedes echar mano de los juegos de mesa, que son una gran manera de pasar un rato divertido sin estar pegado a una pantalla. Aléjate de las peligrosas costas de TikTok o Instagram en los barcos de Port Royal o Ascension Piratas de Abismo, seguro que la aventura es mucho más divertida.
¿Y si no tengo con quién jugar? No pasa nada, lo bueno de los juegos de mesa es que siempre encontrarás alguno que se pueda jugar en solitario. En Darwin’s Journey o Unmatched Relatos Asombrosos, por ejemplo, puedes jugar contra la máquina y retarte a ti mismo, intentando batir tus récords y dejar al automa por los suelos.
Beneficios de los juegos de mesa para grandes y pequeños
Jugar a juegos de mesa tiene efectos positivos en todo el mundo, pero pueden ser de especial utilidad para los más pequeños y para los más mayores.
Los juegos infantiles son una gran manera de que los niños trabajen competencias como la memoria (Sabuesos), la atención o incluso la orientación espacial (Lady Up). Además, les enseñan a gestionar emociones como la frustración o la envidia cuando las cosas no salen como ellos quieren. También son especialmente útiles para mejorar su concentración, enseñarles a entender a los demás y desarrollarse a nivel de percepción.
Todos los juegos de mesa infantiles pueden ayudar a los niños en algún ámbito, pero cuando más se notan sus beneficios es al adaptarlos al aula. Cada vez más profes complementan las clases con juegos, demostrando que aprender jugando no es solo posible, sino también más efectivo. Porque ¿qué mejor manera de aprender geografía que pasando 10 días por Europa?
Y en el otro lado del espectro, los juegos de mesa son una gran manera de mantener el cerebro activo cuando nos hacemos mayores. Cada vez más, la terapia ocupacional incorpora juegos de mesa a sus dinámicas. Porque da igual si son competitivos o cooperativos, de estrategia o de deducción, cualquier juego es perfecto para ayudarles a socializar y no sentirse solos.
Además, ¿sabías que jugar a juegos de mesa ayuda a ralentizar el deterioro cognitivo? Juegos como Sherlock in Time o Arka V pueden ser grandes herramientas para mantener el cerebro activo. Mientras que otros como Tuned ayudan a mantener la destreza en las manos.
No lo decimos porque a nosotros nos encanten. Los juegos de mesa son una gran manera de distraernos, divertirnos y pasar un rato sin pensar en nada más que si atacas al Genio ahora o mejor usas esa carta de ingenio de Houdini. Así que no lo dudes y juega todo lo que puedas, está demostrado que así somos más felices 😉.
